Cistus o jara

Se conoce como jara a diversas plantas, casi siempre del género Cistus, aunque también a algunas del género Halimium. Forman parte de los matorrales mediterráneos y algunas son especies fundamentales en la recuperación de suelos degradados, especialmente tras los incendios forestales.

Son siempre plantas perennifolias, arbustivas, leñosas, que forman parte del sotobosque, suelen formar masas compactas que cubren totalmente el territorio en que habitan, formando un matorral espeso.

Crecen siempre en suelos ácidos (graníticos, pizarrosos) pero casi nunca calizos. Las flores son regulares, hermafroditas y con cinco grandes pétalos a menudo arrugados que caen fácilmente de la flor.

Su gran cantidad de estambres producen mucho de polen, que atrae a muchos insectos, como las abejas que producen miel de jara.

Sus frutos son cápsulas formadas por 5 ó 10 carpelos, que se abren a la madurez en 5 ó 10 cavidades con numerosas semillas.

La madera de Cistus ladanifer, por ser durísima se usa en la fabricación de pequeñas herramientas o piezas que vayan a sufrir gran rozamiento, y también como excelente leña.

Especies:

  • Cistus monspeliensis
  • Cistus salviifolius
  • Cistus laurifolius
  • Cistus albidus
  • Cistus ladanifer
  • Cistus populifolius

Existen otras especies de jaras con los pétalos de color rosa, como Cistus crispus. Con hojas rizadas, Cistus incanus, de la isla de Mallorca o Cistus heterophyllus de Cartagena (Murcia) en la Peña del Águila.