Tipo de ruta: Senderismo de Montaña / Circular
Dificultad: Media
Longitud: 11 km.
Desnivel: 600 m acumulados de subida.
Tiempo estimado: 3 / 4 horas.
Inicio: La Cabrera
Fin: La Cabrera
Mejor época para hacer la ruta: Primavera, verano y otoño
Recomendaciones: Calzado cómodo y agua, ya que no existen fuentes a lo largo del recorrido
Precauciones: En caso de nieve, hielo o niebla abstenerse de hacer la ruta si no se tiene la preparación y experiencia necesaria en senderismo de montaña.
La Sierra de La Cabrera es una estribación rocosa de la Cuerda Larga que integra el macizo granítico más grande de la zona oriental de esta sierra. Es uno de los montes-isla más importantes de la vertiente sur guadarrameña y sus principales cumbres son el Cancho Gordo, de 1.564 m y el Pico de la Miel, de 1.392 m y tiene una longitud de aproximadamente cuatro kilómetros.
La ruta la comenzaremos en el Pueblo de la Cabrera, siguiendo las indicaciones que nos llevará a través de un viacrucis hasta el Convento de San Antonio, a pies del Cancho Gordo. Este viacrucis comparte camino con el GR-10, por lo que encontraremos las marcas típicas de un GR con dos líneas paralelas una roja sobre otra blanca.
Al llegar al convento el GR gira a la izquierda y nosotros debemos llegar hasta la misma puerta del convento, a mano izquierda también, junto a una cruz de piedra sale un sendero que bordea el convento por su parte posterior y enseguida se convierte en una fuerte pendiente que nos lleva hasta la cima del Cancho Gordo, este tramo debemos tomarlo con calma, ya que subiremos desde los 1.190 metros de altitud a los que se encuentra el convento hasta los 1.564 de la cumbre del Cancho Gordo.
Solamente deberemos realizar una pequeña trepada si queremos coronar la cima, en la que se encuentran las ruinas de un antiguo refugio, si no queremos trepar, siguiendo dirección este, deberemos bajar realizando unos ligeros destrepes hasta el Collado Alfrecho para unirnos al PR-M13.
El PR-M13, es una senda muy bien señalizada que recorre la Sierra de la Cabrera por su vertiente norte y que nos llevará hasta el Pico de la Miel, dejando las escarpadas crestas a la izquierda. Una vez en la base rocosa del Pico de la Miel, deberemos subir unos metros por grandes planchas de granito que en ningún caso será necesario realizar una trepada. Las vistas desde lo alto del pico sobre el propio pueblo de La Cabrera y el Embalse del Atazar son realmente fantásticas.
El descenso del pico lo realizaremos por su vertiente norte por el mismo camino de subida, para llegar de nuevo al PR-M13 y bordear el pico por su cara oriental en un descenso que nos lleva de nuevo hasta el Pueblo de La Cabrera.